"Vamos Miriñaque viejo que te vinimos a ver", gritaba un hombre en la tribuna, atrás mío, cuando me ubicaba para sacar la foto de la prueba, metros después de pasado el disco. Y lo gritó en pleno codo, cuando el valiente Lagarto Boy todavía marchaba al frente y Miriñaque recién armaba su atropellada. Lo gritó sin saber lo que pasaba, porque los parlantes externos del hipódromo no alcanzaban a superar el sonido de la multitud y en La Plata pantalla gigante no hay. Lo gritó confiando en él, como casi toda la tribuna; lo gritó imaginando que Miriñaque estaba haciendo lo que tantas otras veces hizo, y así fue.
El tordillo volvió a demostrar que es diferente, y no solo por su talento, sino por esa capacidad de llegar a las personas. El defensor del Parque Patricios sacó relucir todo su potencial y con un remate excepcional se impuso por cuatro largos en un tiempo de 2:29.28 para los 2400mts de arena seca.
De esta manera el hijo de Hurricane Cat, que fue conducido por Francisco Goncalves y entrenado por María Muñoz, llegó a la octava victoria de su campaña, hilvanando cuatro conquistas de Grupo al hilo y manteniendo su invicto nacional en el año 2022.
Con esta notable performance, se sube a la marquesina del Carlos Pellegrini. ¡De pie!
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